Croacia está liderada por dos
centrocampistas veteranos: Modric (32 años) y Rakitic (30). El héroe de la
semifinal es un punta, Mandzukic, de 32 años.
Y así podríamos seguir repasando
los 33 años de Subasic, los 29 de Lovren y Vida... una selección con una media
de edad bastante alta.
Justo lo contrario que ocurre en
Francia, donde ninguno de sus cuatro defensas titulares superan los 25 años, y
en la que muchas de sus figuras están empezando su carrera deportiva, como es
el caso de Mbappé y sus 19 años.
Francia va a disputar su tercera
final de un Mundial. Y lo hará viniendo de jugar una final de la Eurocopa, que
le fue arrebatada en su propia casa.
Su historial con el partido más
decisivo es largo y repleto de luces y sombras. Croacia simplemente no tiene.
Lo más cerca que estuvo de jugar una final, fue en 1998 cuando precisamente
Francia le apartó de la gran final.
Aquellos dos goles de Thuram
todavía pesan en las mentes croatas. La revancha podría servirse en el mejor
plato posible: la final de un Mundial.
Si algo destaca en Croacia por
encima del resto, es su mediocampo. Rakitic y Modric son sus baluartes, líderes
espirituales y reales sobre el terreno de juego.
Su fútbol controlado y de
exquisita técnica, marca el estilo de los hombres de Zlatko Dalic. En la final,
al otro lado, se encontrarán con puro músculo en la sala de máquinas.
Pogba, Kanté y Matuidi. Físico,
físico y más físico. Acompañado de técnica, cierto, pero con la principal labor
en este Mundial de destruir el juego del rival.
Francia pinta como el favorito para ganar, pero quien sabe, en una de esas Croacia da el batacazo.
POSTEADO: 12-07-2018
POR FM LIBRA 106.7 MHZ – Mail de Contacto: infosao2010@gmail.com