Un niño de 11 años fue
encontrado muerto en el baño de su casa de la ciudad de Zapala y ahora
se investiga si el deceso se produjo mientras jugaba al “Mono Espacial”, un
desafío extremo que reemplaza al denominado “Juego del Momo”, que se ha
difundido en todo el mundo en la mensajería de WhatsApp.
De esta manera, se suma a las
sospechas en torno al fallecimiento de una chica, que se suicidó el pasado
domingo en una vivienda de la localidad de Ingeniero Maschwitz, en el partido
de Escobar, y también se atribuye a un reto de este juego virtual.
Según trascendió, en la tarde
del último viernes, tras un llamado a la Policía, el nene fue encontrado sin
signos vitales y con un cinto alrededor del cuello.
De acuerdo a lo indicado por
el comisario mayor Julio Ariel Peralta, cuando personal médico llegó a la
vivienda constató que había muerto por asfixia por ahorcamiento.
El abuelo del niño aseguró
haberlo hallado, después de no obtener respuestas al llamarlo y tras romper la
puerta del baño que estaba trabada.
Tanto el personal médico, como
policial dieron lugar al procedimiento judicial y a la intervención de la
Fiscalía y de los forenses, quienes se encargarán de hacer la autopsia
correspondiente.
El macabro juego “Mono
Espacial” consiste en llegar a un estado de euforia interrumpiendo el acceso de
oxígeno al cerebro a través de la autoasfixia. Esa situación puede ser letal
para los que participen en el reto.
El “Mono espacial” o
“flatline”, es un juego de moda entre los adolescentes que, en algunos casos,
ha provocado incidentes fatales en otros países. Uno de los más conocidos, es
el de un estudiantes de Nueva Jersey (Estados Unidos), que murió a causa del
juego.
Los estudiantes entre 9 y 16
años son los más vulnerables a este fatal juego que, según los Centros de
Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, ha causado más de 80
muertes en aquel país.
El pasado 20 de julio, una
mujer denunció en la ciudad de Perico, en la provincia de Jujuy, que alguien
llamado “Momo”, amenazó de muerte a su hijo de 16 años para que cumpla con los
supuestos retos que habrían pactado.
El adolescente habría
establecido contacto con el número de “Momo”, que se viralizó a través de las
distintas redes sociales y páginas de Internet, y que tiene característica de
Japón, e inmediatamente empezaron las amenazas de muerte.
PUBLICADO EL 29-07-2018