Otro aberrante caso de abusos
sexuales a menores derivó en la condena de un hombre de unos 50 años. De
acuerdo con la investigación, el depravado no sólo violó a su hijastra sino que
obligó a un primito a participar de las indignantes acciones, que incluían
manoseos y tocamientos.
La persona encontrada
culpable, que trabajaba como albañil y obrero frutícola, fue llevada a juicio
oral en las últimas semanas y ayer, un tribunal integrado por Alejandra
Berenguer, Sonia Martín y Álvaro Meynet lo declaró responsable de los delitos
de corrupción de menores de 18 años y abuso sexual con acceso carnal. Los
hechos sucedieron en una localidad cercana a Cipolletti y no trascendieron detalles
de la identidad del depravado debido a que hay menores involucrados.
De igual modo, se supo que los
primeros sometimientos sufridos por su hijastra fueron a los 5 años y se
extendieron hasta su adolescencia. El hombre era la pareja de la madre biológica
de la niña y aprovechaba a violarla cada vez que se encontraban solos en su
casa o en descampados que él frecuentaba, precisaron fuentes cercanas a la
causa. Asimismo, de forma impune, el depravado decidió sumar a un primo de la
menor violada, que era dos años mayor. Su intención era hacer tríos sexuales y
obligaba a los dos primos a intervenir en sus cobardes propuestas.
Para evitar cualquier
contratiempo y una posible denuncia, explicaron las fuentes, el depravado les
sacaba fotos con un celular y los amenazaba con difundirlas.
El temor de las víctimas evitó
que el violador fuera desenmascarado cuando ocurrieron los primeros hechos, y
la niña abusada fue la encargada de denunciarlo en el Ministerio Público Fiscal
de Cipolletti. Para la fiscal Eugenia Vallejos, no hubo dudas de su
culpabilidad y por ese motivo reclamó que se lo condene. En la vereda contraria
se ubicó el abogado particular del acusado, señalando que era una denuncia
tardía y cargada de mendacidad, indicaron las fuentes.
Mientras que ayer se conoció
la declaración de responsabilidad, ahora deberá fijarse la fecha del juicio de
cesura donde la fiscalía hará su pedido de pena. Se especula que el reclamo de
castigo no bajará de los 15 años de prisión.
Al igual que en otros procesos
por abuso sexual, el acusado goza de libertad y posiblemente sea encarcelado
recién cuando la sentencia quede firme.
PUBLICADO EL 02-08-2018